Blas de los Olivos, impresor de los capitanes generales

En 1754 el tipógrafo español Blas de Los Olivos funda una imprenta. Su labor como impresor estuvo marcada por la estrecha colaboración con los Capitanes Generales; en especial con Ambrosio Funes de Villalpando, Conde de Ricla (1720-1782). Durante 27 años fue su imprenta la del Gobierno y Capitanía General de Cuba.

Natural de Sevilla, Blas de Los Olivos se había establecido en La Habana alrededor de 1734, año en el que contrajo matrimonio con una criolla.

Entre 1761 y 1762 se hizo cargo de las impresiones de las Ordenanzas de S. M. para el régimen, disciplina, subordinación y servicio de sus Exercitos, primer libro impreso en Cuba, con 248 páginas. Al año siguiente le corresponde imprimir  el acta de capitulación, suscrita por los altos mandos del ejército inglés y el Gobernador Prado, en nombre de España; también en ese año de Los Olivos fue arrestado por desacato, por haber reimpreso el Almanaque de la Isla de Cuba, donde ponía que era el rey español Carlos III, quien  reinaba en La Habana y no el rey de Inglaterra, dado que la ciudad estaba ocupada por los ingleses.

Además de imprimir varias tesis que tuvieron la novedad de incluir pequeños grabados a modo de ilustraciones, se dedicó a la impresión de escritos religiosos, sanitarios y reglamentos.

En 1764 se le encarga a de Los Olivos un proyecto de publicaciones que incluirían la emisión de una Guía de Forasteros, la aparición de un Mercurio o periódico de publicación mensual y una Gaceta semanal que daría a conocer las disposiciones del gobierno y noticias de otra índole. Logrando la publicación el 17 de mayo del primer  periódico impreso en Cuba: la Gazeta de La Habana, de escasa duración.

En 1777 edita un nuevo Reglamento de Milicias de la Isla de Cuba. También tuvo a su cargo la venta del papel sellado. Blas de Los Olivos, fallece en La Habana en septiembre de 1777, quedando la imprenta a cargo de su yerno Francisco Seguí.